El fenómeno es general, afecta a gran parte de Sudamérica, y golpea de diferentes formas. El impacto de la falta de precipitaciones se ve reflejado en la bajante histórica por la que aún atraviesa el Paraná, provoca complicaciones en la producción y no ayuda a combatir la quema de pastizales, un flagelo que castiga por estos días a gran parte de la región y afecta no solo el ecosistema, sino también la salud de las personas.
La ciudad de Santa Fe no escapa de la gran sequía y así lo demuestran las estadísticas a las que pudo acceder UNO Santa Fe
. Las mismas, revelan que de los últimos 12 meses, en diez se registraron lluvias por debajo de los valores medios de la última década.
La escasez de lluvia, que comenzó a manifestarse en la última parte del año pasado, se agudizó y profundizó en el 2020. Desde julio del 2019, al mismo mes de este año, cayeron 928 milímetros. Ese valor representa un promedio de 77,3 mm por mes; lo que significa un 25,24 por ciento menos del promedio realizado sobre las precipitaciones medias del mismo período, que se ubica en el orden del 103,17 mm.
Durante el último año solo se registraron lluvias por encima de la media en dos ocasiones. Una ocurrió en septiembre de 2019, cuando cayeron 61,25 milímetros; 11,88 mm más que la precipitación media para ese mes de la última década (49,37mm). La última fue diciembre de ese año, único registro superior a la media histórica. Fue recordado por el intenso temporal que sufrió la ciudad durante tres días. Cayeron en total 287 milímetros, 140,43 mm más que los anotados para la media del mismo mes, que es 146,57 mm.
El resto, fueron todos meses negativos y sobresalen octubre del año pasado con un déficit de –75,46, seguidor por noviembre con –101,81.
En este año, todos los registros se ubicaron por debajo de niveles medios. Los meses con menor precipitación de lluvias fueron mayo, con –43,53; abril con –57,82; y febrero con el increíble registro de –126,72.
Los datos fueron suministrados por el Centro de Informaciones Meteorológicas de la Facultad de Ingeniería y Ciencias Hídricas de la Universidad Nacional del Litoral.
Lo meses que se aproximan no son muy alentadores. La semana que acaba de terminar (del 2 al 8 de agosto) volvió a dejar una marcada escasez de lluvias en gran parte del país. El pronóstico extendido del Servicio Meteorológico Nacional (SMN) anticipa para la próxima semana “un aumento muy acotado de la actividad, aunque sin eventos significativos”.
En el último informe climático trimestral, para los meses de agosto, septiembre y octubre, el SMN prevé precipitaciones normales sobre la región del Litoral y este del Noroeste Argentino (NOA); normal o Inferior a la normal sobre el centro del país y oeste de Patagonia; inferior a la normal sobre el este de la región Patagónica y una estación seca sobre el oeste del NOA.
Pronósticos trimestral precipitacioes
Fuente: Servicio Meteorológico Nacional
Pronósticos trimestral temperatura
Fuente: Servicio Meteorológico Nacional
El Paraná dejó en el puerto local, este viernes, una altura de 0,86 metros. Eso representa 2,33 metros menos que la altura media registrada en agosto (últimos diez años). El Instituto Nacional del Agua destacó en su último informe que el escenario de falta de lluvias en territorio argentino se puede hacer “extrapolable” a toda la cuenca del Plata, en territorio extranjero; donde prevalece la escasez de precipitaciones, con déficit hídrico “sobre la cuenca del río Paraguay y las nacientes del río Paraná en Brasil”. El organismo nacional subraya en su último informe que la tendencia climática “no permite esperar una recuperación significativa en los próximos tres meses”.
Fuente: uno santa fe