Se trataba de una estructura sumamente deteriorada, por lo que los vecinos la consideraban una bomba de tiempo.
Pudo haber sido una tragedia. Una vivienda de barrio Sargento Cabral se desplomó cerca de las 3 de la madrugada del jueves, mientras los vecinos dormían. Por fortuna, la casa estaba deshabitada y no hubo lesionados.
El edificio, ubicado en calle Huergo al 1900, tenía serios inconvenientes en su estructura, levantada entre la década de 1960 y 1970. Según relató uno de los muchachos que trabajaba refaccionando la vivienda, la misma fue comprada por una mujer hace un año, pero al notar el tremendo deterioro decidió marcharse. Desde ese momento, quedó deshabitada.
La casa estaba ubicada en en el límite de los barrios Sargento Cabral y Villa María Selva
L
a caída fue advertida por los vecinos, quienes se agolparon en la calle para saber qué ocurría. Pero la peor parte de la historia se la llevó la pareja que vive en una casa detrás de la derrumbada. Sólo pudieron salir de su hogar con ayuda de los bomberos, quienes debieron disponer de una escalera desplegable para el rescate. Afortunadamente, no hubo que lamentar lesionados ni repercusiones en edificios linderos.
En diálogo con el móvil de Aire de Santa Fe, el trabajador contó que la casa derrumbada fue mal construida desde los cimientos. De hecho, no contaba con ellos, sino con una placa de adoquines que, lógicamente, no soportaron el peso. A ello se sumó los problemas de cañería vitro, utilizada en viviendas añejas y cuya principal característica es la falta de flexibilidad. “Sabíamos que iba a derrumbarse pero no pensamos que tan rápido”, expresó una de las vecinas.
Fuente: airedesantafe.com.a